El Barça mantiene su pulso con LaLiga por el calendario: tensión máxima en la recta final de temporada

El FC Barcelona continúa su particular batalla contra LaLiga por la congestión del calendario, en medio de una temporada que se define en todos los frentes. A pocas semanas del cierre del curso 2024/25, el equipo dirigido por Hansi Flick pelea por LaLiga, la Copa del Rey y la UEFA Champions League, lo que ha disparado la cantidad de partidos en un margen de tiempo muy reducido.

Durante gran parte de 2025, el Barça ha jugado prácticamente cada tres días, una situación que no solo ha generado un enorme desgaste físico, sino también tensiones institucionales. Flick ha sido claro en sus críticas hacia el reparto de fechas, considerando injusta la programación de algunos encuentros clave.

La tensión ha escalado hasta el punto de que el club azulgrana ha presentado una queja formal ante LaLiga, y lo ha hecho de la mano de su eterno rival: el Real Madrid. Una alianza poco habitual, motivada por la defensa del famoso "mínimo de 72 horas" entre partidos oficiales, necesario para garantizar la recuperación de los futbolistas.

Un calendario sin tregua

El último ejemplo fue la victoria del Barça por 4-3 ante el Celta de Vigo, un triunfo agónico que permitió a los culés mantenerse en lo más alto de la tabla. Apenas tres días después, el equipo deberá medirse al Mallorca en otro duelo liguero.

Y como si eso fuera poco, tan solo cuatro días más tarde, el 26 de abril, el Barça disputará la final de la Copa del Rey frente al Real Madrid, en un nuevo episodio del Clásico que podría definir parte de la temporada.

Cada hora de descanso es crucial, y tanto Flick como el cuerpo técnico insisten en que este ritmo no solo condiciona el rendimiento, sino también el riesgo de lesiones en una plantilla ya afectada por varias bajas importantes.

En un momento decisivo del curso, el Barça no solo lucha por títulos en el campo, sino también por condiciones equitativas fuera de él. El desenlace de esta pugna institucional podría marcar un precedente para futuras temporadas en el fútbol español.